
Título: Senhoras y Senhores, estamos flutuando no espaço
Coreografía: Danielle Mesquita
Intérprete: Danielle Mesquita
Cuatro ojos de luz que no ven nada. En las sombras, desde donde nada tiene sentido, Danielle Mesquita se adentra en un viaje al centro de sí misma en Senhoras y Senhores, estamos flutuando no espaço, la primera de las piezas integradas en el programa de ‘Movilizando Identidades’ del Certamen Coreográfico de Madrid, presentadas el 8 de diciembre.
Cuatro ojos de luz que no ven nada. Ella no ve nada. Se pierde y en la oscuridad explora. Su cuerpo está hecho de millones de células móviles. Todas las articulaciones de su cuerpo representan un sinfín de posibilidades. En ese mecer intuitivo y sublime, va encontrando respuestas a la luz de esos cuatro focos potentes que no ayudan a ver. ¿Pero de dónde nacen los impulsos que permiten su búsqueda? Nacen de ella. Su cuerpo le devuelve su propia identidad. Pero sigue perdiéndose, hay tantos ojos… Las miradas confunden cuando se quiere ver con el alma. Al fin se abren sus alas, pero no pueden volar. No pueden volar pero son suyas. ¿Qué hará con sus alas?
La impresionante calidad de movimientos que nos regala el cuerpo de Danielle apoya la precisión de este cuerpo dedicado en su totalidad a una búsqueda que parte de cada una de sus células. Con la ventaja de quien no parte de ninguna idea, invitando al cuerpo a entender por sí mismo y a crear significados, ella parece querer interrogar todas las posibilidades, todas las combinaciones, todos los caminos. En una apuesta sincera y humilde, Danielle nos regala la belleza de esa búsqueda en la que se pierde y se encuentra, esa búsqueda de la que somos testigos.
Danielle explica en el coloquio posterior, que ella quería entablar una conversación del cuerpo consigo misma, y que en el confinamiento comenzó este trabajo que es tan difícil explicar. “¡Qué difícil es nombrar lo que haces!”, nos cuenta. Cuando se queda sin palabras, Danielle explica que ella quería crear algo que naciese de ella misma, y sin duda ahí es donde nace la magia. Ojalá todas las creaciones empezaran con esa inquietud. Senhoras y Senhores estamos flutuando no espaço, no me devuelve a mi propia experiencia de confinamiento, pero me lleva de la mano directa a lo que espero ver en una pieza de danza: valentía. La valentía extrema de crear desde lo que tienes, ofreciéndolo generosamente a quien tenga ojos para ver lo invisible.