
Título: IN-SIDE
Coreografía e interpretación: Lucía Montes & Mado Dallery
Dos cuerpos vivos!!!
Llenan el escenario con su presencia…
Una luz ténue refleja sus definidas siluetas, cubiertas por finas vestiduras de color pálido y suave algodón…
La pieza IN-SIDE, bailada y coreografiada por Lucía Montes & Mado Dallery, nos atrapa desde el primer momento gracias a la potente ejecución de cada cuadro enmarcado en su propuesta. Cada movimiento, cada imagen y cada gesto es plasmado con vigor, fuerza y determinación.
Vista durante la sesión de finalistas del Certamen Coreográfico de Madrid, organizado por Paso a 2, en el Centro de Cultura Contemporánea Condeduque, corazón cultural del distrito centro, IN-SIDE conecta con su público desde la danza. En un constante cambio de formas conscientemente colocadas en el espacio y que tiende al infinito, van apareciendo figuras para el deleite de nuestras pupilas. Unas figuras que nos invitan a ver siempre más allá.
No podía apartar la mirada. Cada movimiento, milimétricamente calculado y ejecutado, dibujaba una nueva imagen, una tras otra y cada una más maravillosa que la anterior…
Me sentí como flotando entre nubes, unas nubes cálidas y apacibles, románticas y celestiales. Me costó tomar notas. Pero no porque no tuviera nada que contar. Todo lo contrario…
Un juego sublime de dos cuerpos compenetrados que se funden el uno con el otro de una forma mágica, atrapando al espectador y llevándolo a un mundo fantástico donde Danzar es una expresión de Amor. Y digo esto porque con sus movimientos pausados recorrían delicadamente el cuerpo contrario, transitando sutilmente por cada centímetro de piel. Explorando, cuidando, encajando un cuerpo con el otro para acabar formando un solo arco, una puerta por la que se proyectaba un reflejo de otra dimensión. Una dimensión simbólica, imaginable, un mundo donde dos cuerpos se entrelazan para encontrarse, y se recorren mútuamente para llegar a lo más profundo, al corazón.
Cómo decía Albert Einstein: “El Arte es la expresión de los más profundos sentimientos por el camino más sencillo”. Creo que faltan más piezas de danza como ésta, capaces de llevarnos lejos, a un momento mágico e indescriptible de estremecimiento mediante la conexión entre cuerpos – incluyendo el nuestro.
Desde mi humilde opinión esta fue la pieza más hermosa y mejor ejecutada de esta 35ª Edición del Certamen.